lunes, 23 de marzo de 2009

La absurda oposición de la iglesia


Según nuestra amiga Wikipedia: "Profiláctico (término proveniente de preservar de la concepción), también llamado condón o preservativo, es un elemento que se utiliza como método anticonceptivo y de prevención de varias enfermedades de transimisión sexual.

¿Cómo sabemos que el preservativo de verdad funciona? Cada preservativo pasa por una prueba general. La prueba electrónica aprovecha las propiedades aislantes del hule y de algunas resinas sintéticas, para detectar rasgaduras o perforaciones en la superficie del preservativo.

Cada unidad es montada sobre un molde metálico, el cual es sumergido en una tina que contiene una solución conductora de electricidad. Si hubiera una rasgadura o perforación, el molde de metal sobre el que está montado el preservativo recibirá una descarga. En tal caso, ese preservativo es descartado de forma automática.

Otros controles de calidad son:

Volumen de estallido: se mide la capacidad de aire que soporta el preservativo antes de estallar.
Presión de estallido: Se mide la resistencia a la presión sobre la superficie del preservativo.
Inspección visual de defectos: Se buscan burbujas, malformaciones o pliegues.
Suspensión con agua: Se buscan orificios no visibles, rellenando una muestra de preservativos con agua para comprobar si se filtra.
¿Cuáles son las ventajas del uso del preservativo? Son muy accesibles y no necesitan prescripción médica, no tienen efectos secundarios, pueden ser utilizados como método anticonceptivo complementario, protegen contra las enfermedades de transmisión sexual, entre ellas el VIH, además, después de abandonar su uso, se recupera inmediatamente la fertilidad.

Sabiendo esto...¿porqué la iglesia se opone a ello? Afirman que la mejor forma de evitar el sida es la abstinencia y sólo conciben el sexo para crear vida, no admiten el placer, ya que es pecado, además, el líder actual de la iglesia a nivel mundial, el Papa Benedicto XVI afirmó que el uso del preservativo incrementa el problema del VIH. Esto, sumado a la última campaña de la iglesia española, Protege mi vida, en la cual se ve un bebé humano y a una cría de lince, y afirman que el lince está más protegido que el bebé humano, hacen que la iglesia retroceda cada vez más en el tiempo, demuestren su ignorancia científica y se caben su propia tumba.

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